martes, 8 de noviembre de 2011

COMO FUNCIONA EL ACOSO EN GRUPO

Cuando las crisis en las relaciones laborales entre personas alcanzan su paroxismo en forma de rivalidades, envidias, conflictos, broncas, etc. es decir, en la forma de la tradicional “guerra de todos contra todos” que Hobbes analizó, surge un epifenómeno mimético propio del sistema que tiende a restablecer el orden: el mecanismo del chivo expiatorio.[3]
Los grupos en crisis, amenazados por los costes de coordinación y por la amenaza que significa la desintegración de la unidad, la violencia generalizada y el peligro de las rencillas que desencadena la venganza tienden a seleccionar a algunos de sus miembros para, mediante el mecanismo del linchamiento multitudinario y unánime, restablecer el orden y la unanimidad perdida.
Tradicionalmente y según René Girard, las comunidades humanas hacían esto para reconciliarse consigo mismas, y esto se materializaba en un linchamiento físico y a una violencia que significaba literalmente la desaparición a manos de una multitud enfurecida de algunos individuos que, debidamente seleccionados, funcionaban a modo de chivos expiatorios de sus grupos o comunidades.
Se trataba de cargar sobre un miembro la animadversión generalizada de todos los demás y de lincharlo de forma comunitaria o gregaria. La participación de cada uno de los miembros en ese mecanismo linchador era urgida y exigida como parte de la socialización y muestra de su pertenencia o membrecía al grupo. Un análisis psicológico del funcionamiento de todos los grupos humanos en crisis nos permite identificar una constante social: cada vez que existe un peligro para el grupo que amenaza su integridad, es decir que pone en riesgo la supervivencia del grupo como tal, tiende a desencadenarse automáticamente este mecanismo.[4]
El grupo que acosa se transforma por efecto del mimetismo en un gang o mob, tan violento como poco consciente de su propia violencia. Sin embargo quien acosa puede ser un psicopata organizacional.[5] Estos individuos suelen tener plena consciencia de lo que hacen a pesar de que no sientan nada por las que se convierten en sus víctimas.

Estos individuos suelen tener la plena consciencia de lo que hacen a pesar de que no sientan nada por las personas que se convierten en sus víctimas. Prácticamente como a mí me ha ocurrido, según personas que tampoco trabajan en ese lugar, desde los primeros días de estar yo en ese lugar, ya era víctima de las envidias de cierta sangüijuela -necesita marionetas de su misma condición- para "tener" la sartén por mango. Le ha costado casi 8 años fastidiar... lo que sí me dice bastante gente que conocen a esa sangüijuela de lejos es que, se gastará mucho dinero en medicinas....

2 comentarios:

  1. Qué peligro tiene estar en ese lugar trabajando. Hay ahì una que va de encargadilla, con esa sí que hay que tener cuidado, es una bocas y muy falsa, su hermano terminó en el Alkanadre de Hondarribia hasta las pelotas, y mi hermana en una tienda lo mismo, curraban las dos y, muy mandona y muy falsa... Imagino que te habras tenido que encontar apaleado y sin saber por dónde te daban... y esas 4 hermanas metiendo a gente de la familia o conocidas... muy sospechoso. Está bien que informes a qué lugar no hay que ir.

    ResponderEliminar
  2. Sí, muy bocas y muy falsa... muy amigita de otra que está también en la barra... en mi presencia.. actuaban.. como si se llevabaran mal... pero no.. tergiversando todo a mis espaldas, mintiendo.. el último mes de estar ahí, empezaba a tratarme de malas maneras, dándome órdenes,,,hasta que le traté como ella me trataba.. en fin, me defendí, sin más.. gracias a esas dos alimañas, la cerda de cocina y la psicópata que está en la otra cafetería,,, me han robado.. pero no voy a parar hasta que me den lo que me han robado.

    ResponderEliminar

Comenta si quieres dejar tu opinión